Pocas cosas hay más ricas que un buen cocido madrileño, pero con esta maldición que pesa sobre algunos miembros de esta familia que todo nos engorda, no conviene abusar. Así que yo hace años que ya no hago un cocido de verdad, hago esta versión light, que aunque no es de dieta, para qué nos vamos a engañar, sí que evita añadir demasiada grasa. Y queda rico. No es lo mismo, pero te quita el mono. Allá voy con mi emulación del cocido madrileño.
Ingredientes para el cocido madrileño ligero
- 1 Puerro
- 2 Zanahorias
- 1 Nabo
- 2 patatas
- 1 rama de apio
- 2 pechugas de pollo (sin piel)
- 1 chorizo
- 2 botes de garbanzos cocidos
- 2 pastillas de caldo de carne
- Agua
- Sal
Preparación del cocido
- Llena la olla de agua hasta la mitad.
- Pon el agua sobre el fogón y empieza a echar los ingredientes. En primer lugar, echa las verduras: el puerro, las zanahorias, el nabo, las patatas, el apio. Yo corto el puerro en 2 trozos y pelo el nabo, la zanahoria y la patata.
- A continuación, echa las pechuga de pollo y, en este caso, un trozo de chorizo para darle vidilla. Estamos intentando no echar muchas grasas a nuestro cocido, por eso las pechugas no van con piel. Podrías evitarnos el chorizo y poner un trozo de jamón o de codillo, o nada, no queremos destrozarnos la dieta. El caso es que en mi casa si no le echo chorizo se comen el cocido sin ilusión.
- Como no le has echado mucha chicha al cocido, te aconsejo que le eches 2 pastillas de caldo de carne para que el cocido coja sabor.
- Echa también ya los dos botes de garbanzos.
- Cierra la olla express y ponla a hervir durante unos 30 minutos, no mucho más. El pollo y el chorizo están hechos de sobras en media hora y así no se deshace. Si no tienes olla express, hazlo en olla normal. Cuanto más rato lo tengas más rico te saldrá. Eso sí, ojo no se te deshaga.
- Transcurrido el tiempo abre la olla express con mucho cuidado.
- Coge otra olla y un escurridor y cuela el caldo para separarlo de las verduras, los garbanzos y la carne.
- Pon la olla con el caldo al fuego y echa los fideos. En cinco minutos, podéis empezar a comer.
¡A comer! ¡Cada uno que se sirva!
Ya lo tenemos listo. Yo dejo por un lado la sopa de fideos. Por otro lado, los garbanzos y las verduras. y por otro, la carne. En este caso, como hay poca carne, junté el chorizo con los garbanzos y aparté el pollo… para hacer unas croquetas… también muy de dieta… Bueno, las croquetas son para mis nietos que esos no tienen problema de engorde.
A lo que iba, yo lo dejo todo separado y dejo que cada uno se sirva. Hay a quien le gusta la sopa clarita. Hay quien la prefiere bien cargada de fideos. Hay quien se echa los garbanzos a la sopa… En fin, las posibilidades son infinitas, así que cada uno sabe bien lo que le gusta.
¡Ah! Yo siempre caliento un poquito de salsa de tomate. Me encanta comerme los garbanzos con la patata y echarle un poco de tomate por encima. ¡Delicioso!!!!
En fin, yo hace siglos que no hago un cocido madrileño tradicional, pero seguro que encontramos a alguien en esta familia que lo comparte con nosotros. De momento, mi emulación del cocido madrileño os aseguro que da el pego y, aunque no es lo mismo, es un buen apaño y está hecho en menos de una horita que el tiempo es oro.
Ya me contaréis.
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