Ensalada templada de gulas

Tras tantas semanas de excesos en el que no nos hemos privado de nada, hay que intentar volver al redil. Para eso ya se sabe, no hay secretos: lechuga y pechuga. Pero en realidad, hay maneras para conseguir disfrutar de una buena ensalada y te lo voy a demostrar con esta ensalada templada de gulas. Vamos a darle vidilla.

Ingredientes para la ensalada templada

• 1 Lechuga o 1 bolsa de mezclum de lechugas
• 1 tomate raf
• Nueces peladas
• 1 paquete de gulas
• Aceite, sal y vinagre al gusto

Preparación de la ensalada de gulas

1. En primer lugar, lava bien la lechuga, cortala, escurrela muy bien y ponla en un bol. Yo compro una mezcla que ya te viene preparadita en una bolsa. Soy comodona, qué se le va a hacer. Así que para mí, lo primero, es abrir la bolsa y poner las lechugas en un bol grande.
2. A continuación, lava el tomate. Puedes pelarlo o no. En este caso, me lo curro y lo pelo…. me resulta más agradable a la hora de comerlo, pero es opcional. Una vez lavado y pelado, o no, cortalo en rodajas o en tacos y añádelo al bol con la lechuga.

3. Es el momento de añadirle la sal. También al gusto del consumidor. Si puedes ahorrártela… pues mejor,más sano.
4. Ahora añade un puñado de nueces peladas.
   

   Preparación de las gulas.

5. La preparación es bastante simple. Abres el paquete de las gulas con guindilla, lo echas en una sarten y la pones al fuego durante un minuto para calentarlas.Cuando estén calientes, apaga el fuego, pesca la guindilla y apártala para no fastidiarle a nadie la comida.

6. Para terminar, añade las gulas al bol de la ensalada.

7. Remuévelo bien y listo. ¡A disfrutar! Rapidito que se enfría

Consejos extra para la ensalada templada.

Mi consejo es que cada uno aliñe su ensalada en su plato, a su gusto. Así que lleva el bol con la ensalada, el aceite, el vinagre y la sal a la mesa, que cada uno se sirva lo que quiera.

No des por hecho que a todo el mundo le gusta la ensalada como a ti. Por ejemplo, yo no soporto el sabor del vinagre mezclado con la lechuga. Da igual que el vinagre sea de módena, de manzana o de lo que sea, mezclado con la lechuga me sabe a rayos. Soy incapaz de comerme la mezcla. Así que mi consejo vale para esta ensalada y para todas.

Sin embargo, hay a gente que le encanta la ensalada flotando en vinagre, pues que no se prive, se lo añade ella misma y tan contenta.

¡Que la disfrutéis!